Te ayudamos a calcular la solvencia de tu empresa
Para calcular la solvencia de tu empresa necesitarás obtener el balance de situación y extraer los siguientes datos:
- Activo total: La inversión de mi empresa
- Total de deudas: Al pasivo total hay que restarle el patrimonio neto
Una vez que poseas esta información podrás introducirla en la siguiente calculadora para obtener más información sobre la solvencia de tu empresa.
| Igual al 2 | Valor razonable, inversión financiada al 50% entre fondos propios y deuda externa. |
| Por encima de 1.5 | Solvencia elevada y genera tranquilidad. También puede haber activos improductivos. |
| Por debajo de 1.5 | El nivel de solvencia no es suficiente y genera desconfianza entre los acreedores. |
| Cerca del valor 1 | Se disparan las alarmas, las inversiones se sufragan con financiación externa. |
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En MADEMI estamos a tu disposición para ayudarte.
Contacta con nosotros¿Qué es la ratio de solvencia?
La solvencia es una de las ratios más importantes ya que nos ayuda a detectar de inmediato si las finanzas están equilibradas o que la empresa puede comenzar a tener problemas financieros.
También nos indica cuantos euros tiene la empresa entre bienes y derechos (inversión) por cada euro que tiene de deuda. Por lo tanto, mide la capacidad que la empresa tiene para afrontar las deudas, cuantos euros tiene para respaldar cada euro de deuda.
Ser solvente significa que se puede hacer frente a los pagos contraídos. Una empresa es más solvente cuanto más consistente resulte su capacidad de pago. Si los activos no alcanzan la totalidad de los pagos, la situación cambia ya que el patrimonio vale menos que la suma de las deudas.
Diferencias entre solvencia y liquidez
Es importante diferenciar entre liquidez y solvencia. La liquidez es la capacidad que la entidad tiene para obtener dinero en efectivo. Se puede ser muy solvente y no disponer de liquidez. Esta situación se puede dar cuando el activo no corriente es muy superior al activo corriente. Por lo tanto, toda empresa con liquidez será solvente, en tanto que no toda la empresa solvente poseerá liquidez.
Aunque son dos conceptos diferentes, lo común es relacionarlos entre sí. Podemos argumentar que una mayor liquidez proporciona una mayor capacidad de pago, y por ende una mayor solvencia. Es decir, cuanto más dinero líquido posea, mayor capacidad tendré para atender mis obligaciones de pago. Aunque no siempre tiene por qué ser así. Si el deudor posee patrimonio suficiente con el que responder a sus deudas, aunque no tenga dinero en sus cuentas bancarias, podrá solicitar un préstamo al banco poniendo como garantía el patrimonio poseído. En este caso, una falta de liquidez no sería indicativo de una falta de solvencia.
¿Cómo se mide la solvencia?
Para saber la solvencia de una empresa, existe una fórmula muy sencilla que se puede emplear partiendo de los datos que nos ofrece el balance de situación.
La solvencia se calcula mediante la siguiente fórmula:
Ratio de solvencia = Activo total / Pasivo total
En el activo total englobamos tanto los activos no corrientes como los corrientes (mi inversión), mientras que el pasivo total integra el pasivo corriente y no corriente (mis deudas).
La cifra de la ratio de solvencia nos indica hasta qué punto la financiación externa hace frente a la inversión de la empresa. Cuando el valor oscila cerca del 1, se disparan las alarmas ya que se sufragan las inversiones con financiación externa.
Un valor razonable puede ser el 2 ya que nos indica que la inversión está financiada al 50% sobre capital propio (patrimonio neto) y externo. Si el valor está por debajo del 1,5 indica que el nivel de solvencia no es suficiente y genera desconfianza sobre acreedores o posibles proveedores. Si está muy por encima de 1,5 la solvencia es eleva, puede generar tranquilidad, pero también se puede interpretar que pueden existir activos improductivoso cual no es aconsejable. No obstante, siempre hay que ver con más detalle la composición de las partidas que generan el balance.
Cómo mejorar el ratio de solvencia
Si el resultado obtenido no nos satisface podemos encontrarnos ante la necesidad de saber cómo mejorar el ratio de solvencia de la empresa. Como ya hemos nombrado, su valor óptimo se sitúa en torno al 1,50.
Para calcular la solvencia necesitaremos conocer el valor del activo y pasivo total. Para mejorar la ratio, si esta es inferior a 1,50 necesitaremos aumentar el montante del activo o disminuir el del pasivo. Por el contrario, para un ratio superior a 1,50 podemos optar por disminuir el importe del activo o aumentar el del pasivo.
Hay que considerar que el mismo valor va a tener diferentes apreciaciones en función de la actividad de la empresa e incluso de la posición geográfica de la misma. Las empresas comerciales presentan una ratio inferior que las manufactureras. Sin embargo, ello no significa que resulten menos solventes.
Para mejorar situaciones no deseadas, podemos reflejar algunos ejemplos a considerar:
- La ratio está por debajo de lo deseado y lo pretendemos subir.
- Realizar ampliación de capital con aportaciones de los socios con lo que aumentamos el activo.
- Ampliaciones de capital que se empleen para saldar deudas, con ello disminuimos el pasivo.
- Obtener beneficios con la actividad y destinar los resultados a incrementar el activo o pagar deudas pendientes.
- Dar entrada a acreedores como socios con sus deudas, para que disminuya el pasivo.
- La ratio está por encima de lo deseado y lo pretendemos regular.
- Distribuir dividendos a los socios, con lo que disminuye el activo.
- Devolver aportaciones a los socios y también disminuye el activo.
- Adquirir más bienes y servicios pagándolos a crédito y no en efectivo. De esta forma incrementa la deuda del pasivo.
Si desea realizar un estudio de solvencia en su empresa, en MADEMI, nuestros asesores contables en Zaragoza le ayudarán a poder realizar todo tipo de estudios y análisis económico-financieros para poder evaluar diferentes ratios e indicadores de la contabilidad de su empresa y de esta forma poder proponerle soluciones, que le ayudarán en la toma de decisiones internas, y de esta forma poder dirigirle de forma eficaz hacia la consecución de sus objetivos empresariales.
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